lunes, 1 de octubre de 2007

Las Hojas Muertas



Como un gorro sin cabeza permaneció esperando su utilidad. Que le digan para qué es buena. En la espera decide soltarse el pelo. Dejar caer las curvas que hoy se ven rojizas. Imponer todo el volumen a los paseantes 'aburrientes' y escribir una crónica de ello. Después de five seconds piensa que aunque egresó de una carrera aceptable para su familia, necesita que le digan para qué es buena. Y recuerda -como un consuelo- que no es la única. Existe una chika que vive en una zona linda, apacible e integrada al urbanismo tipo Loft y adulto pujador de la Capital, que también padece de la DuDA. La DuDA es buena para vivir. Creo que piensa que la mantiene despiertA. Pero demasiado DuDAr parece MaTaR algunas veces. Eso también lo piensa esa chika. Modern Girl, para qué vamos a andar con cosas. La moderna que no se somete a los delirios 'egológicos' de ninguna tecnología y sigue soñando que el Periodismo puede rescatarla de la violencia, la injusticia, las dietas, los hombres cardiópatas, las mujeres putontas, las viejas con poto de grasa y las amistades lésbicas. La moderna que, mientras todos manejan un celular con cámara, videos, teleconferencias, mensajes que viajan por el aire y música de recitales bossa nova, aún carga cada tres días el mismo de hace 7 años, que pesa tres kilos y no tiene imágenes de sus amigos. La moderna Modern Girl que ama a Martín Nicanor y lo pasea como si fuera un perro por esa calle cerca de su casa. Observadora y asustadiza lo pasea. Y piensa que para algo debe ser buena y que algún día dejará de temer. Tal como dejó de temer a algunas drogas. Tal como se encierra cada mes con su vecino del piso de abajo a ver películas calientitas, películas que recrean más tarde. Y no es su NoVio 'aburriente'. Pero eso no importa. Dejó de DuDAr y ahora hace de vez en cuando lo que su madre no puede saber. Por ese motivo optó por dejar de enamorarse de verdad y sólo ama espejismos que no la harán llorar. Como muchas mushashas Capitalinas que han probado la amargura del alcohol puro, la dulzura de una buena pipa y los calambres de una buena noche de sexo sin amor. Por eso se somete bajo contrato a dietas, ejercicios y tratamiento mental. Para estar preparada y ser más que una chika pensante. Y ambas saben -Miss Intoxic y Modern Girl- que aunque el próximo año, cuando caigan las hojas muertas y tengan que abandonar a la fuerza la DuDA para empezar lo que dicen que es real, seguirán firmando contratos con Rouge y haciendo exactamente lo contrario a lo que estaban acostumbradas sus madres. Porque de qué otra forma se pueden preparar para una vida diferente a la aprehendida por sus troesmas, si no es abandonandose a horas de amor y sexo, drogas verdes, escritura frenética antes de un cierre, comida sana a luca, lecturas en el metro mascando chicles y conversaciones por teléfono de VEINTE horas por saber para qué son buenas.







***



Martín Nicanor, el paseado.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Escapando unos minutos del delirio egológico de las tecnologías de los "logs", me siento a escribirte Miss Intoxic para comentarte que los contratos cada vez me asientan más y que las dudas sin duda son de lo mejor. Tal como andar en tren. Tal como leerte. Tal como Martín Nicanor. Él sí que es de lo mejor.

Anónimo dijo...

CaTarsis

hace tiempo q no te leia, siempre es refrecante leer lo q escribes...te llame el otro dia y no estabas ...bueno te keria contar q voy a trabjar en proteomica de salmones!!!! estoy emocionada y caga de susto...y a propósito del tema dudo muxo de mi.

Macarena Gallo.- dijo...

hola
me sentí muy identificada con lo q escribiste.. a pesar de haber estudiado,aún no sé para qué sirvo y siempre hago lo contrario a lo que estaba acostrumbrada mi santa madre.

ya,te dejo, saludos

Mujer Doméstica dijo...

Queridas todas...
Quizás por eso las conozco y me llevo bien con ustedes... porque somos unas dudosas de mierdaaa!!


Pásenlo bien! Or bua!