jueves, 14 de febrero de 2008

La Va-yai-Na


Resulta que la vayaina es un animal curioso. Es como un organismo aparte del resto del cuerpo. Aunque no tan apartada. La Intoxic siempre ha pensado que igual está unida al corazón. Es decir, no es como el dick. El dick se manda solo. Es como una mamba africana que con su único ojo ve a quién puede atacar. Y no existe un diálogo entre el dueño de la mamba y ella. En cambio hay muchas mujeres que charlan con su vayaina. Entre ellas, la Intoxic. Desde chica se dio cuenta que su pequeña vayaina le pedía cosas. Una vez, antes de conocer a la mamba, la vayaina intoxic le dijo a su ama que necesitaba recibir cariño. Que ya dejara los roces inconcientes y al azar. Que ya era momento de empezar a analizar sus gustos y preferencias en profundidad. Así que la Miss tomó nota de lo que le pedía su vayaina cobriza caprichosa.

Cuando ya las mambas comenzaron a acercarce peligrosa y deliciosamente, la Intoxic tuvo que aprender que su vayaina también le hablaba en esos momentos. Por ejemplo, si el dueño de la mamba era de su total gusto, era difícil caminar, porque ahí, en la vayaina todo estaba tan resbaloso que las piernas se deslizaban como atontadas. Cuando la mamba y su dueño no han hecho bien el trabajo, la vayaina se taima y se cierra enojada, como diciendo "aquí ni cagando entrai saco de huea". Pero todas esas reacciones muchas veces no podrían efectuarse sin el corazón. Al final él habla y manda también. Porque cuando late fuerte, las palpitaciones pueden sentirse en la vayaina. Y ¿qué pasa cuando una lolita no escucha a su corazón y sólo escucha a su vayaina? Esa huevada es relativa. Miss Intoxic no se arrepiente cuando puso atención sólo al nivel de humedad de su vayaina. Por eso tampoco le gusta que la juzguen. El asunto con las vayainas va más allá de la formación y la cultura. La mamba ve las cosas desde un punto de vista más egocéntrico. Mientras que la vayaina no puede separarse del corazón.
MMM... será porque es 14?

2 comentarios:

dEsoRdeN dijo...

Las mambas también hablan, pero a veces son malas y peligrosas consejeras, porqué sólo piensan en el 'aquí y ahora'. Pero cuando una mamba y una vayaina se entienden, entonces eso es el clímax, el exponente máximo de la armonía universal. Mmmmmmm...!! ;)

0-catatonica-0.blogspot.com dijo...

y asi con la pussy burger y el chicken eye, ambos tienen voluntad propia.

ya besos y cuida al chiko