viernes, 10 de agosto de 2007

Azul de Metileno

Con la boca partida corrió escupiendo cada diecisiete pasos. Había imperiosidad de quitarse ese sabor poco andrajoso de la boca. Hasta ese momento, no se había dado cuenta de que olvidó ser cara dura e insolente, como la primera vez con él. Su boquita amable la puso en una posición amable, como de periodista y entrevistado. Esa caca que enseñan en las escuelas fanáticas... cuántas veces después se dio cuenta de que había que olvidarse de todo lo que se habló en las sala! Fuck, casi todo.

Cuando llegó a su casa, en la parte mal vista de la ciudad, tomó el frasco de azul de metileno y se lo metió entre los dientes. Mordió con fuerza y el jugo helado le adormeció en one, two, three la lengua. Después sonrió fente al espejo y volvió a ser tan andrajosa como antes, como su casa andrajosa, su mente andrajosa, su ideología andrajosa, sus relaciones andrajosas... De esa forma iría a verlo y le diría: hey! te dedicaste al matonaje político desde bebé!

*Si Modern Girl la ayudaba, saldrían de ahí con vida.

1 comentario:

Unknown dijo...

Y se salvaron, verdad?