miércoles, 10 de junio de 2009

La Parada

"Aquí hablo de los períodos ocultos de esa misma juventud, de ciertos ocultamientos a los que he sometido ciertos hechos, ciertos sentimientos, ciertos sucesos. Empecé a escribir en un medio que predisponía exageradamente al pudor. Escribir para ellos aún era un acto moral. Escribir, ahora, se diría que la mayor parte de las veces ya no es nada". El amante, Marguerite Duras.

Por algunos piojos años esta fue mi sosteniente única. Declaración huérfana que no pude cambiar por tan verdadera. Justificaba mis desvaríos. Aclaraba mis dudas y luego palabras. A esto me dediqué, a escribir. Pura ficción, pura realidad. Sub-realidades. Suddenly surgió un punto aparte. Fuera de esta ventana se movió el mundo y sus capas. Lamentablemente el terremoto afectó estas líneas. Se quebró la hebra que las unía en su enorme dispersión. Durante el periodo de un año este sitio camina como camaleón. Mientras, se me hizo titánico poder juntar mis líneas. Reconstruir quien era. Fallé. Pero yo soy animal que celebra errores. Accidentes geográficos reorganizaron mi estructura. No hay adjetivos. Soy gris, el buen gris.
Creo que mi transición está en marcha. Acompañada de mejores figuras de peso voy descubriendo nuevas capacidades. Mi única sosteniente ya es otra. No puedo revelarla. Todavía. Creo que este es el borde. El fin. La Parada. Pero como algunos han dicho, las cosas no se terminan ni de destruyen, solamente se transforman. Esperemos...

2 comentarios:

dEsoRdeN dijo...

Dame una pista para seguir tu transformación, y me curraré el buscarte

;)

danielsilvestre dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.